La Atención Temprana interviene en la población infantil de 0-6 años, su familia y su entorno.
Pretende dar respuesta lo más pronto posible a las necesidades transitorias o permanentes que presenten los niños/as con trastornos en su desarrollo o que tienen el riesgo de
padecerlos.
¿Mi hijo necesita atención temprana?
La detección puede llevarse a cabo bien por el pediatra en las revisiones de “niño sano”, por la escuela infantil o centro educativo, o por los propios padres.
En cualquiera de estos casos, la familia debe comunicárselo al pediatra ,que será el que estime si es necesario o no este servicio. Una vez que el pediatra realice la derivación a la unidad de Atención Temprana (UAIT) y determine la idoneidad de intervención en el Centro de Atención Temprana (CAIT), el equipo realizará una valoración familiar y del niño para determinar la necesidad de un plan de actuación individual y los servicios que son necesarios.
Nuestro objetivo
Valorar e intervenir sobre los niños que presentan trastornos en su desarrollo, sobre sus familiares y su entorno, para potenciar su capacidad de desarrollo y de bienestar, posibilitando su integración en el medio familiar, escolar y social, así como su autonomía personal de la forma más completa posible dotándolo de los recursos materiales y humanos necesarios.
La familia: Nuestra mayor aliada
La familia son las personas que pasan la mayor parte del tiempo con el niño, por tanto al considerarlos como partícipes activos en el proceso evolutivo y educativo es recomendable que formen parte del equipo de Atención Temprana.